Nos visitaron Marcelo y Diana Wasser quienes nos contaron todo lo vivido ese fatídico 7 de octubre en el Kibutz Nirim.
Fue una experiencia tan importante como enriquecedora poder escucharlos, saber de primera mano lo vivido, vivir junto a ellos ese minuto de silencio nos hizo sentir más unidos que nunca.
Seguimos pidiendo que los secuestrados regresen sanos y salvos a su casa.